El 27 de marzo, por fin llegaba el día tan ansiado por nuestra Hermandad, el Miércoles Santo. En este día hacemos nuestra salida procesional dentro de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús del Huerto y San Diego.
El día se presentaba con importantes chubascos durante toda la madrugada que se prolongaron a lo largo de la mañana. A pesar de ser nuestra estación de penitencia en la tarde, durante la mañana aún había numerosas cosas pendientes por solucionar de cara al desfile de la tarde. Los hermanos colaboradores se dividieron en dos grupos. Por un lado un grupo de hermanos tuvieron que recoger el cuartel del día anterior y preparar el de esa misma noche. y por otro lado otro grupo se dedicó al adorno floral de la imagen y a solucionar los pequeños detalles que quedasen en el trono.
Estaba claro que no iba a ser nuestro día porque ambos menesteres se alargaron más de lo esperado.
Por la tarde la lluvia pareció dar un pequeña tregua y todo hacía indicar que al igual que nos había ocurrido en años anteriores el tiempo nos permitiría realizar nuestra estación de penitencia.
Cuando muchos estábamos convenientemente uniformados y dispuestos a salir para la Iglesia de San Francisco cayó una importante tromba de agua que hizo suponer lo peor.
Al llegar a la Iglesia de San Francisco nos encontramos con la noticia de que se había decidido salir a la hora establecida, 19:00 horas. Así que pudimos presenciar como la imagen de San Diego enfilaba la cuesta de San Francisco. Tras ella se apresuro a procesionar la imagen de Jesús del Huerto.
Cuando se dispuso a salir la tercera de las imágenes (el Cristo de los Azotes) la lluvia poco a poco hizo acto de presencia. Transcurridos unos minutos en los que no cesaba la imagen de Jesús del Huerto volvió rápidamente a la Iglesia Conventual de San Francisco. Por otro lado la imagen de San Diego se refugió de la lluvia en la Iglesia de San Bartolomé.
Tras estos sucesos se reunió el cabildo extraordinario de la Cofradía que acordó suspender el desfile procesional y acompañar de regreso a la imagen de San Diego. Aunque la noticia era esperada, fue recibida con una enorme decepción por parte de todos los hermanos de Jesús de la Ventana. En ese momento pasaron por nuestras cabezas todos los momentos vividos a lo largo del año, todo el trabajo realizado, todo el esfuerzo hecho durante los ensayos de andas, todo los preparativos para el desfile procesional, etc.
Finalmente se realizó un Vía Crucis dentro de la iglesia y todas las imágenes de la Cofradía fueron mecidas al son de las marchas interpretadas por la centuria romana de los Mohínos.
Fue un Miércoles Santo muy triste para todos. Nuestras caras no podían disimular la pena que llevábamos dentro. Esperemos que no volvamos a vivir una situación parecida nunca más y el buen tiempo nos acompañe en los próximos años.
Sirva este artículo para animar a todos esos ventanucos apenados y para hacerlos partícipes desde ya, en los preparativos de la Semana Santa del 2014, que a buen seguro será mucho mejor que la del 2013.
